Capital: El lunes empiezan los controles de pescados

La Municipalidad de la Ciudad de San Juan, a través del Departamento de Higiene y Bromatología dependiente de la Dirección de Comercio, respondiendo a la demanda masiva de productos de mar y río, frescos y congelados, durante las Festividades de Semana Santa realizará los controles necesarios en el ejido capitalino garantizando a los vecinos el consumo apto de estos productos. 

En este sentido el municipio cuenta con el apoyo directo del Instituto de Investigaciones Tecnológicas en prácticas analíticas que determinen la aptitud o no de las especies sometidas a muestreo en casos específicos.

Las inspecciones se cumplirán a partir del lunes 10 de abril, durante todo el día, atendiendo que, desde la semana anterior a Semana Santa comienza el acopio por parte de los mayoristas.

El Departamento de Higiene y Bromatología dispondrá de 6 inspectores distribuidos en dos grupos. Cada uno contará con el auxilio de una movilidad con el objetivo de cubrir dos grandes sectores que tendrán como eje de división la Av. Libertador Gral. San Martín.

Los inspectores realizarán en principio un control de aptitud del pescado fresco observando sus características organolépticas (color y olor) para después emplear la cinta reactiva (PH). En caso de que el resultado pusiera en duda la aptitud del producto muestreado, se utilizará el peachímetro electrónico, y en caso de ser necesaria una práctica analítica más contundente se recurrirá al Laboratorio del Instituto de Investigaciones Tecnológicas. Ante la exigencia por parte del comerciante de un peritaje en este Instituto, se seguirá la norma procedimental del caso.

Una vez visitados los comercios y puestos en la vía pública, ya concluida la inspección se dejará constancia de la misma mediante acta y se entregará una oblea como comercio inspeccionado por la Municipalidad.

Según el encuadre legal de las inspecciones, el marco reglamentario básico a aplicar corresponde al Código Alimentario Argentino, Ley Nº 18.284, especialmente en sus Capítulos I y VI, que fija las condiciones de higiene que deben presentar los comercios en general, las pescaderías en particular y las normas específicas del control de aptitud de los productos de mar y río. Las Ordenanzas Municipales completan las exigencias a cumplir, especialmente en el control de los puestos de venta de pescado en la vía pública.

En los puestos instalados en la vía pública se exige el cumplimiento de normas sanitarias preventivas como la cobertura del producto con hielo, resguardo de la luz solar, cajones en altura alejados del piso. A la vez que los vendedores deberán contar con su respectivo certificado de salud y provistos de uniforme reglamentario.