Los ascensos irregulares tensaron la cuerda en Tribunales
La mesa de diálogo entre la Corte y la Unión Judicial venía reuniéndose cada último martes de mes, pero en noviembre no ocurrió. Podría caerse el ámbito de negociación por la polémica acordada 110.
Corre serio peligro la mesa de diálogo entre la Corte de Justicia y la Unión Judicial después de los polémicos ascensos en Tribunales.
El detonante del conflicto fue la acordada 110 con la que se reglamentó el ascenso de 310 empleados del Poder Judicial. Entre otros aspectos irregulares, aparecieron cuatro familiares directos del cortista Juan Carlos Caballero Vidal y el ascenso a escribiente mayor a un empleado procesado por narcotráfico.
El gremio judicial encabezado por Sebastián López ha dicho que corre serio peligro la mesa de diálogo. Es una mesa que se creó para mantener contacto fluido entre ambas partes y evitar la conflictividad.
Está integrada por el presidente de la Corte, Adolfo Caballero, quien nunca fue a una reunión. Pero sí va asiduamente el cortista Guillermo De Sanctis. También van el secretario adminstrativo Javier Vera y el subsecretario Mauricio Cerezo. Por parte del gremio están López y el resto de la conducción.
En ese ámbito van acordando medidas que hacen a la vida interna del empleado judicial. Sesionó todos los últimos martes de cada mes desde marzo. Pero en noviembre no sesionó. Y por ahora la Corte no ha convocado ninguna nueva audiencia.
López exige que se ascienda a los empleados que tenían mayor puntaje y quedaron relegados. Es condición obligatoria impuesta por el sindicato para retomar el diálogo.