Se veía venir: mucho vino y poco vidrio

La realidad es contundente . El año pasado se consumieron 57 millones de litros de vino más que en 2019 dentro de Argentina, lo que se tradujo en un crecimiento interanual del 6,4%. En algunos envases, como el botellón de 1,5 litros, el repunte fue incluso mayor (35%).

Sin embargo, la mejora trajo aparejado un problema inesperado para los bodegueros, especialmente para los pequeños y es que la demanda de envases superó a la oferta. Tal es así, que las entregas que se pactaban a una semana, terminaron en una demora sustancial que en algunos casos llegó a los tres meses.

Las opciones para los actores de la industria son pocas porque existen tres empresas nacionales que producen botellas  y una de ellas tiene una planta en nuestra provincia: Cattorini Hnos. Sin embargo entre todas parecen no dar abasto con el desarrollo que experimentó la industria del vino durante el año que pasó.

La principal dificultad estriba en que algunas fábricas estuvieron trabajando al 50 por ciento por la infección lo que motivó que no pudieran cubrir la totalidad de pedidos. Solamente entregaban envases a los grandes fraccionadores, pero a los bodegueros chicos les fueron restando la provisión anclados a los protocolos existentes para evitar un recrudecimiento de la pandemia.

Además de los plazos de entrega llegaron los aumentos en los precios porque las empresas fabricantes no congelaron nunca los valores por unidad. Los bodegueron debieron pagar la mercadería y si ésta aumentaba, también debían abonar las diferencias. 

 Normalmente los pedidos de botellas se hacen entre septiembre y noviembre, cuando empieza a hacer calor y aumenta el consumo.

La pregunta obvia es que pasará con la vendimia cada vez más cerca. El escenario se ve complicado para los pequeños bodegueros, que no saben si podrán contar con el “insumo principal” para poder distribuir sus productos.

Los valores promedio por envase rondan aproximadamente los 33 pesos más IVA por unidad y algunos compradores, a modo de solución temporal  se decidieron por incorporar mercadería de otros países, especialmente de Chile, con tarifas que no son favorables.

Fuente: Los Andes