Barreda confesó que no quiso matar a su hija menor

Ricardo Barreda, el múltiple femicida de La Plata, se encuentra postrado en una cama del hospital Magdalena V. de Martínez, de Pacheco, por un problema en la próstata. Allí es cuidado por varios enfermeros, que se convirtieron hasta en sus confidentes. Y el ex odontólogo, de 81 años, hizo una revelación conmovedora: "Lo peor es que a Adriana, mi hija menor, no la quise matar”.

"¿Sabe qué? Dicen que no me arrepiento de lo que hice. Eso es mentira. No hay día que no sienta culpa. Lo peor es que a Adriana, mi hija menor, no la quise matar. Estaba como loco, giré, disparé y después me di cuenta de que era ella”, le dijo a uno de los enfermeros que trabaja en el turno noche, según publicó Big Bang News. Fue el 15 de noviembre de 1992 cuando Barreda mató a escopetazos a su esposa, a su suegra y a sus dos hijas, en La Plata.

Luego de escuchar lo que decía sobre Adriana, el enfermero le preguntó por Cecilia, su hija mayor: "Ella me odiaba y me quería ver muerto. Mi esposa y mi suegra le habían llenado la cabeza. A la última que maté fue a mi suegra. Pero los crápulas de mis abogados me hicieron decir que la última en morir había sido mi hija menor, así yo heredaba la casa”.