A lo largo del año, los feriados ocupan un lugar preponderante en la organización de la vida social y laboral en Argentina. Estos días constituyen oportunidades para el descanso, la reunión familiar y la planificación de actividades recreativas o turísticas.

El feriado más próximo en el calendario nacional argentino corresponde al miércoles 9 de julio, una fecha que conserva su condición de inamovible y está reservada a la conmemoración del Día de la Independencia.

En Argentina, el 9 de julio no solo implica una jornada de receso laboral, sino que representa uno de los hitos más emblemáticos en la historia del país, porque rememora la firma del Acta de la Declaración de Independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata en el año 1816.

La decisión oficial, confirmada por el gobierno, establece que este feriado no se transfiere a ninguna otra fecha y, además, no se le sumará un feriado puente ni el lunes ni el viernes, inhibiendo cualquier posibilidad de generar un fin de semana largo en conexión directa con la celebración.