Natacha Jaitt sin filtro: todas sus bombas y escándalos

Natacha Jaitt fue madre de dos hijos, ejerció los roles de actriz, conductora, vedette, modelo, y sin ánimos de esconderlo, reveló que fue trabajadora sexual. Saltó a la fama por su participación en Gran Hermano (España), y sus primeras armas en la televisión argentina las hizo en Playboy TV.

Sin embargo, su fama absoluta llegó de la mano de los escándalos, con el #PuntitaGate como mayor artífice, cuando expuso en los medios de comunicación y en las redes sociales un affaire con el periodista deportivo Diego Latorre, cambiando así su perfil mediático para siempre.

A continuación, todas las bombas que Natacha hizo explotar en vida, durante una carrera sin filtros ni frenos, y por supuesto, llena de polémicas.

Todo comenzó en 2004, cuando ingresó a Gran Hermano 6 (España). Generó revuelo al revelar su desempeño como trabajadora sexual. Estuvo encerrada por 98 días y se quedó con el tercer puesto del reality. Al año siguiente, protagonizó un escandaloso e histórico momento en el programa de Chiche Gelblung al hacer la demostración de un orgasmo en vivo, y contar sobre su participación en múltiples orgías.

Tras pasar sin pena ni gloria por el Bailando por un sueño en el 2008, Jaitt realizó una obra de teatro producida por Gerardo Sofovich, producciones para revistas y Playboy TV, y otros pequeños ciclos en televisión y radio.

En 2011, protagonizó una polémica foto dedicada a Silvina Escudero, en la cual le recordó su imagen sexual filtrada en internet.  Un año más tarde, sería víctima de algo insólito: fue hackeada por activistas pro-Palestina. En abril de ese mismo año, tendría un duro cruce al aire en Animales Sueltos con Cinthia Fernández, con acusaciones y gritos de “gato” y “drogadicta” de por medio.

Durante el 2013, Jaitt fue denunciada por golpear salvajemente a su ex suegra, y meses después volvería a protagonizar un escándalo con violencia física mediante: se agarró a las trompadas con Annalisa Santi, a quién tildó de descerebrada.  En el 2014 también haría uso de su lengua sin filtro para decir que Wanda Nara es prostituta y que Viviana Canosa era “infelizmente mal garchada”.

Finalmente, en el 2017 llegaría su gran quiebre mediático: el PuntitaGate. Todo inició con chats calientes entre ella y Diego Latorre, en el cual ambos arreglaban un horario para encontrarse a tener sexo. Natacha luego aseguró que se filtraron las conversaciones tras el robo de su tablet.

Viejas charlas entre Yanina y la morocha pusieron sobre la mesa la chance de una posible Icardeada, mientras que el periodista de Fox Sports apeló a negar todo lo que pudo, afirmando que él no era el de los chats. Pero la mentira tiene patas cortas, y con la posterior revelación de audios del ex futbolista pidiéndole a Jaitt “que le vacíe los huevos”, el escándalo pasó a otro nivel.

Diego atravesó un proceso depresivo y deseos de suicidio, Natacha compartió más videos y audios íntimos e incluso reveló que el ex futbolista se puso en “pose rana” y le pidió la “puntita” de algún juguete sexual, otorgándole de esta manera el nombre a la polémica saga.

Jaitt continuó utilizando su Twitter para disparar contra la panelista, el ex futbolista y todo aquel que se cruce por su camino. Incrementó su cantidad de seguidores y luego visitó el piso de Intrusos, donde continuó apuntando contra el periodista infiel y su esposa. Gambeta finalmente aceptaría que tuvo encuentros sexuales con la morocha, aunque ella sostuvo que tenían una relación.

Más tarde, Yanina afirmó que tanto ella como Diego fueron extorsionados por Natacha, y finalmente, se llegaría a un acuerdo de confidencialidad, no sin antes insinuar que Diego tuvo un amorío con Carlos Fernando Navarro Montoya.

Como era de esperarse, el acuerdo fracasó, y se inició una causa judicial con Fernando Burlando como defensor legal de los Latorre, a quien Natacha denunció penalmente y con quien tuvo fuertes audios filtrados.  La mediática terminaría procesada por extorsión.

Ese 2017 fue muy convulsionado para Natacha. En la ceremonia de los Martín Fierro de Radio tuvo un duro cruce con Elizabeth “La Negra” Vernaci, y fue víctima de violencia de género al recibir una paliza por parte de su ex en plena vía pública.

Cuando parecía que su 2018 iba a ser tranquilo, surgió un fuerte escándalo que parecía que nada iba a tener que ver con ella: los casos de pedofilia en las inferiores del Club Atlético Independiente. Aunque su visita al programa de Mirtha Legrand cambió todo.

Sentada a la derecha de la diva, Jaitt comenzó a despotricar y realizar fuertes acusaciones, llamando pedófilos a figuras del ambiente como Carlos Pagni, Enrique Pinti y Alejandro Fantino, al dirigente Gustavo Vera, y también protagonizó una fuerte discusión que pasaría a la historia junto a Mercedes Ninci.

A partir de allí, Natacha obtuvo un reconocimiento que le valió ser receptora de palos por todos lados. Por un lado, muchos usuarios de las redes la enaltecieron por querer salvar a los chicos del club de Avellaneda del abuso, y por lanzar picantes opiniones de gente destacada en los medios, pero por el otro, fue acusada de ser trabajadora de servicios de inteligencia, de “vendehumo” o de simplemente querer prensa.

El histórico paso de Jaitt por La Noche de Mirtha también fue un mal trago para la diva, que se vio en el centro de la polémica por haberle dado lugar a las declaraciones de Natacha. La Chiqui y Nacho Viale afirmaron estar angustiados por la situación y pidieron disculpas, aunque la mediática luego aseguró que fue utilizada para obtener rating.

Natacha acusó días más tarde a Ninci de decir que “ella iba a terminar como Nisman”. La periodista la denunció y mostró amenazas que recibió en su teléfono. La morocha terminaría declarando frente a la fiscal Garibaldi por la causa de Independiente y se conocerían polémicos detalles de su testimonio.

Como si todo esto fuese poco, Jaitt se metió en un escándalo paralelo: los posteos de Morena Rial contra su papá. Primero todo indicaba que iba a ser una rivalidad, debido a que la hija del periodista la trató de “gato usado”, pero después formaron una alianza en contra del conductor de Intrusos, revelando fuertes mensajes y audios de él. Por otra parte, Natacha también se encargó de destrozar a Juan Cruz Sanz luego de que se conociesen fuertes videos íntimos y sexuales de él.

A mediados del año pasado, Jaitt se mostró picante contra Florencia Peña por el PoliamorGate, e hizo una contundente revelación: afirmó ser abusada sexualmente por Fabián Gianola. Luego, la salud de Natacha atravesó difíciles momentos, pero eso no le impidió disparar contra Elisa Carrió y Mauricio D’Alessandro.

Cuando por fin se recompuso, protagonizó una nueva polémica con otro hombre: Martín Ciccioli, de quien aseguró recibir mensajes con intentos de “levante” y compartió capturas de los chats.  

En diciembre del 2018 estuvo envuelta en un escándalo policial. Fue agredida por un oficial que le impidió ingresar a su casa cuando la fue a notificar de una causa judicial y terminó detenida. Fiel a su estilo, compartió el video del tenso momento.

Siempre atenta a lo que sucedía en la farándula argentina, Jaitt despotricaba contra casi todos. Otro que no se salvó de su crudeza a la hora de opinar fue Luciano Castro, a quien la mediática tildó de falopero, violento y homosexual.

La muerte se llevó a Natacha y dejó abierta la gran cantidad de causas en la Justicia que ella tenía. Además de las anteriormente mencionadas contra Ninci y los Latorre, otro rival que iba a tener que cruzarla en Tribunales era Baby Etchecopar, que fue denunciado por la actriz luego de que éste dijera que la hizo echar de la radio, y por supuesto, la causa más reciente de todas y quizá la más impactante: la violación.

Jaitt denunció a Pablo Yotich y Maximiliano Giusto por abuso sexual con acceso carnal, y aseguró que la drogaron introduciéndole cocaína en la bebida que estaba tomando. La conductora asistió a Tribunales, donde ratificó la denuncia y se descompensó. Días más tarde, se conocería el video de los instantes posteriores al momento denunciado. Ella también apuntó con vehemencia contra Verónica Lozano y el colectivo de Actrices Argentinas, por no tratar su caso con tanta importancia como sí hicieron con otros.

Horas antes de que apareciera muerta en el salón de eventos Xanadú, la propia Natacha se encargó de escrachar a Giusto, y exclamó que si él o Yotich quedaban en libertad, ella misma iba a matarlos.

Protagonista de una carrera agitada, que fue desde los escándalos más frívolos y superficiales hasta fuertes denuncias por delitos serios y oscuros, la vida pública de Natacha tuvo un factor determinante: la violencia. Seguramente el deseo de sus seres más queridos es que por fin pueda encontrar la paz en su descanso.

Fuente: Exitoina