Hace algunos días, el uruguayo Santiago Tato Algorta resultó ser el ganador de Gran Hermano en la edición 2025/2025.

El jugador se impuso, en una final emocionante, sobre Ulises Apóstolo con el 62.8% de los votos.

El vencedor se llevará los 70 millones de pesos que fueron anunciados al comienzo de la competencia, más los 15 millones que se sumaron en concepto de rendimiento bancario. Al dinero se suman una casa prefabricada, un año de cerveza gratis y una moto valuada en aproximadamente 3 millones de pesos.

Gran Hermano: una cláusula pone en jaque al ganador

Frente a este panorama positivo, muchos se preguntan cuándo, el ganador, podrá cobrar el dinero teniendo en cuenta las demoras en ediciones anteriores.

De acuerdo a algunas informaciones, esto no es nuevo ya que Marcos Ginocchio –ganador del 2023-, tuvo que esperar varios meses para cobrar su premio debido a una cláusula del contrato que habilita a la producción a postergar el pago.

Gran Hermano: una cláusula pone en jaque al ganador

Esto, no es antojadizo, sino que los “hermanitos” al entrar a la casa firman un contrato en el que dejan en manos de la producción, la administración de los tiempos y formas de entrega del premio.

A la espera de los millones argentinos, Tato también deberá consensuar de qué manera irá recibiendo los otros premios que también tienen sus correspondientes demoras.