José María Muscari se emocionó hasta las lágrimas con una sorpresa de su hijo

José María Muscari protagonizó uno de los momentos más emotivos de la televisión esta semana durante su visita a Desayuno Americano, el ciclo que conduce Pamela David por América TV. 

El reconocido director teatral no pudo contener las lágrimas al recibir en vivo un mensaje sorpresa de su hijo Lucio, quien lo saludó con motivo del Día del Padre.

El joven, que fue adoptado por Muscari hace casi dos años, le dedicó unas sentidas palabras a través de un video grabado especialmente para la ocasión. “Feliz día, viejo. Te quería agradecer por todo lo que hacés por mí, porque siempre estás, aunque te salga un laburo, aunque tengas que hacer alguna nota o lo que sea”, expresó Lucio, en un mensaje que conmovió profundamente al productor teatral.

Visiblemente emocionado, Muscari explicó que no esperaba el saludo debido a la personalidad reservada de su hijo. “No puedo acreditar lo que acabo de ver, porque Lucio es anticámara. Es un adolescente que, para subir una foto o una historia, le tengo que pedir permiso. No le gusta aparecer en ningún lado”, explicó, entre lágrimas.

Durante la charla, el creador de la obra “Sex: viví tu experiencia” también reflexionó sobre su experiencia con la paternidad y destacó la relación que viene construyendo con su hijo día a día. “Los adolescentes, en general, no dicen lo que sienten. Entonces, escucharlo es muy movilizante”, aseguró.

En ese sentido, Muscari no escatimó elogios para Lucio: “Yo lo amo. Creo que tengo un hijo mágico. No me podría haber pasado algo mejor. Es extraordinario como persona, por sus sentimientos, su forma cotidiana de ser mi hijo y de completar este vínculo que vamos armando”.

Además, el director teatral reconoció que, antes de adoptar a Lucio, tuvo algunos prejuicios que hoy quedaron completamente atrás. “Cuando adopté a Lucio, él ya tenía 15 años. Era súper pensante, ya formado. Y si vuelvo al Muscari de hace dos años, veo que estaba lleno de prejuicios que no tienen nada que ver con nuestra vida cotidiana actual”, confesó.

Contrario a lo que temía, Muscari descubrió que su vínculo con Lucio fue transformador para ambos. “Si te muestro al Lucio de hace dos años y al que está ahora conmigo, vas a ver que cambió en mil cosas. Y todo eso se construye con amor, con lo cotidiano, con trabajo”, sostuvo. Y concluyó: “Yo también cambié un montón, gracias a cosas de él que me ayudan”.

Para cerrar, reveló con orgullo el sueño profesional de su hijo, alejado del mundo artístico: “Quiere ser piloto de avión. Ya está full con el tema del inglés porque sabe que es muy importante para su carrera”. Una historia de amor, transformación y afecto que emocionó a todos los presentes y al público que lo siguió desde casa.