Los Auténticos Decadentes lanzan su vino en Mendoza
La popular formación eligió una icónica imagen para la etiqueta de la bebida inspirada en el álbum "Mi vida loca".
En Mendoza, tierra del vino, el festival Wine Rock volvió a convertirse en una experiencia sensorial que fusiona paisaje, música y cultura. En su última edición, no sólo fue el escenario de grandes shows, sino también el punto de encuentro entre dos pasiones argentinas: la vitivinicultura y el rock nacional.
Uno de los protagonistas de este cruce artístico fue una bodega ubicada en Luján de Cuyo llamada Viña Las Perdices que, desde hace años, desarrolla ediciones especiales de vinos junto a bandas emblemáticas del país. En esta oportunidad, la bodega presentó sus etiquetas junto a Las Pelotas y La Renga, y sorprendió al público con una gran novedad: el lanzamiento inminente de un vino junto a Los Auténticos Decadentes.
Desde la bodega, detallaron que el vino Decadente será un Cabernet Franc cosecha 2023, con ocho meses de crianza en madera y origen en el Valle de Uco. Por supuesto, la etiqueta no pasará desapercibida: se inspira en el disco Mi vida loca, respetando su estética colorida y provocadora, un guiño directo a los fans. Este vino ha sido, desde el comienzo un proyecto de celebración más que comercial.
Las ediciones de estos vinos homenaje no apuntan al gran consumo, sino a un público nicho, con tiradas limitadas que mantengan el carácter exclusivo y auténtico de cada banda. Se venden en vinotecas, en la tienda online de la bodega y en su local físico, e incluso pueden adquirirse en cajas mixtas con vinos de Las Pelotas, La Renga y ahora también Los Auténticos Decadentes.
El recorrido incluye un Malbec y un Cabernet Sauvignon Reserva de Las Pelotas, además de su particular Cabernet Franc “Víctima del cielo”. Por el lado de La Renga, el Malbec fue acompañado por un blend tinto bautizado “El Diablo y la Muerte”, en honor a una de sus canciones más icónicas.
Más que vinos con etiquetas llamativas, se trata de productos pensados como objetos de culto, ideales para fanáticos que buscan un regalo especial o simplemente celebrar con una copa cargada de historia musical.
Así, el vino se convierte en una canción embotellada, y el rock, en un maridaje que celebra la identidad argentina desde los viñedos hasta el escenario.