JUDICIAL
Caballero Vidal, indagado por delitos de lesa humanidad
El excortista llegó caminando, se tomó un café en una tradicional confitería y dialogó con el periodismo. “Acá no voy a decir absolutamente nada, voy a decirlo en el lugar que corresponde”, sostuvo.
Llegó sonriendo y calmo, pero al ver a la prensa decidió cambiar el rumbo y refugiarse en una confitería en la que se encontraba su abogado, en inmediaciones del Juzgado Federal. El excortista Juan Carlos Caballero Vidal ya es indagado por su presunta vinculación en delitos de lesa humanidad cuando fue magistrado de primera instancia durante la dictadura. Al ser abordado por los cronistas, el excortista se mostró reacio a dar declaraciones, pero aclaró que “Acá no voy a decir absolutamente nada, voy a decirlo en el lugar que corresponde”, disparó fiel a su estilo. “Más de lo que comentaron ustedes no se puede decir. Si ustedes me lo permiten, voy a tratar de llegar a horario”, agregó.
Más adelante, y ya ingresando al juzgado, afirmó que se “sorprendió” por la acusación “después de tanto tiempo”. Caballero Vidal deberá dar explicaciones ante el juez y el fiscal Francisco Maldonado por dos causas. Una de ellas es la llamada Cevinelli en la que está en la mira porque no habría hecho nada por la víctima (que fue secuestrada y torturada) y encima, habría amenazado al abogado defensor. El otro caso es por no impulsar la pesquisa al tomar conocimiento de la muerte de Ángel José Alberto Carvajal, torturado hasta la muerte, pese a que ordenó su autopsia por pedido del RIM 22. Las causas por delitos de lesa humanidad precipitaron la salida de Caballero Vidal de la Corte.
El juez federal, tras el planteo del fiscal, solicitó a la Cámara de Diputado el juicio político del entonces ministro, ya que necesitaba que perdiera los fueros para poder indagarlo. Acorralado, Caballero Vidal presentó su renuncia como integrante del máximo órgano judicial de la provincia. Primero lo hizo de manera condicional hasta que la Anses comenzara a liquidarle el haber jubilatorio (beneficio que ya tenía concedido). Pero luego de las críticas porque dicho proceso podía demorar meses hasta seis meses, un día después rectificó su dimisión y le puso fecha de vencimiento a partir del 1 de diciembre.
