Esta semana, por orden judicial, un popular local gastronómico de Rawson se vio envuelto en un conflicto por adulterar papeles que habilitaban su funcionamiento. El gestor de la habilitación, identificado como Franco Noriega, un joven de 26 años, es quien complicó a los dueños del local y ahora deberá realizar trabajos comunitarios además de pagar una multa de $100.000 como parte de una resolución judicial por tras intentar falsificar documentación para la habilitación del local ‘Bar del Titi’ , ubicado en ese departamento.

El hecho comenzó a ser investigado a fines de agosto, cuando Víctor Cabrera, jefe de la División Siniestros de Bomberos, presentó una denuncia en la UFI Genérica. Cabrera señaló que Noriega presentó documentación irregular en la Dirección de Bomberos mientras intentaba renovar el certificado de servicio de protección contra incendios de su bar.

Según lo aportado por la Justicia, el certificado de habitabilidad presentado contenía datos alterados sobre las superficies construidas y al aire libre, lo que llevó a descubrir que no había sido emitido por el Director de Planeamiento y Desarrollo Urbano Municipal.

Sin embargo, pese a la falta de documentación ilegal administrada por Noriega quien fue contratado por el dueño, desde el local de Rawson se comunicaron con este medio para aclara la información difundida por la Fiscalía, argumentando que las implicaciones legales contra la persona no afectarían el funcionamiento de ese bar, por lo tanto sigue funcionando con normalidad.

Siguiendo con el detalle del caso que llegó al juez de Garantías, Noriega alcanzó un acuerdo con Fiscalía para evitar una condena penal mediante una suspensión de juicio a prueba (probation), comprometiéndose a:

  1. Pagar una multa simbólica de $100.000, destinada a un merendero, en tres cuotas con vencimiento mensual.
  2. Realizar 30 horas de trabajo comunitario en la Municipalidad de Capital, con un plazo de cumplimiento de 5 meses.

La decisión judicial busca reparar el daño causado y promover la responsabilidad social, evitando una condena que podría haberle generado antecedentes penales. Noriega fue encontrado responsable del delito de falsificación de instrumento público, pero gracias a este acuerdo y el cumplimiento de sus obligaciones, no hubo consecuencias legales mayores.