Una joven de 20 años fue acusada de robarle las tarjetas de crédito al abuelo de su amiga y utilizarlas para realizar compras por más de 250 mil pesos. El hecho ocurrió durante una serie de visitas que la chica realizaba habitualmente a la casa del hombre, ubicada en San Juan. La justicia le concedió la suspensión de juicio a prueba y ahora deberá resarcir a la víctima y realizar tareas comunitarias.

La imputada fue identificada como Candela Luciana Luna, estudiante universitaria de la carrera de Diseño. Según estableció la investigación judicial, durante 2024 la joven asistió en varias oportunidades a la casa del abuelo de su amiga. En una de esas visitas, aprovechó un descuido para abrir la billetera del hombre y sustraerle las tarjetas.

El caso salió a la luz en diciembre de 2024, cuando la víctima comenzó a recibir notificaciones por compras que él no había realizado. Ropa, comida, bebidas alcohólicas y pedidos de delivery fueron algunas de las adquisiciones registradas. Al revisar su billetera, notó que las tarjetas no estaban y sospechó de la amiga de su nieta.

La joven había gastado más de 250 mil pesos en distintos comercios, entre ellos un supermercado y una reconocida marca de indumentaria femenina. La denuncia fue radicada por el abuelo en la Unidad Fiscal de Investigación (UFI) de Delitos contra la Propiedad, dando inicio a una causa penal por el delito de hurto.

Pese a la gravedad del hecho, Candela no fue detenida. Este martes, durante una audiencia judicial, el abogado defensor, el fiscal y los ayudantes del fiscal informaron al juez que habían llegado a un acuerdo para la suspensión del juicio a prueba (probation).

El juez avaló la propuesta, por lo que la joven deberá pagar tres cuotas de 36 mil pesos al damnificado como compensación económica. Además, cumplirá 25 horas de tareas comunitarias en la Municipalidad de Rivadavia durante un plazo de tres meses, sin percibir remuneración.