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¡Muere de ternura! Acaricia a lindo gato callejero y termina con parálisis

La mujer tuvo que someterse a un año de tratamiento para recuperar la movilidad
jueves, 24 de enero de 2019 · 15:18

Perros, gatos y otros animales tienen la mala fortuna de ser tratados como objetos y sufrir el abandono de sus dueños. Lametablemente, pesar del esfuerzo de diferentes organizaciones para tratar de erradicar este problema, es poco el éxito obtenido.

Este conflicto afecta a la sociedad y a la salud de las personas, para demostrarlo, el siguiente hecho que ocurrió en Portugal.

Resulta que una mujer, de 24 años de edad y originaria de Gran Bretaña, viajó unos días a Lisboa. Durante su estancia encontró un pequeño gato callejero que le pareció muy lindo, motivo por el cual comenzó a acariciarlo y lo llevó a vivir con ella a su hotel.

En su último día de vacaciones, la fémina comenzó a tener fuertes dolores de cabeza, vómitos y hasta desmayos. A pesar de esto, decidió regresar a Inglaterra sin antes acudir con un médico.

Al llegar, inmediatamente fue hospitalizada y los especialistas descubrieron que tenía una grave infección causada, al parecer, por comer pollo crudo.

Cuando le preguntaron si había consumido este alimento, ella se negó. Ante esto, los doctores le cuestionaron si había tenido contacto con animales.
Estuve todo el tiempo con el gato, pues no se quería ir y yo me encariñé mucho con él”

Ante esta respuesta, le explicaron que el gato con el que convivió estaba enfermo por pasar demasiado tiempo en los contenedores de basura buscando alimento para sobrevivir.

‘Se trata de una infección severa, es probable que con reposo y medicamento especializado se alivie’, explicaron los especialistas.

Sin embargo, el tratamiento no funcionaba y ella se sentía cada vez más débil, hasta que un día no pudo caminar y tuvo que utilizar una silla de ruedas para poder desplazarse.
En ese momento sabía que algo andaba mal, tuve miedo de quedar invalida de por vida”

Los médicos aseguraron que la infección era tan fuerte que si no se trataba a tiempo corría el riesgo de perder sus extremidades.

Después de un año de tratamientos y terapias, la joven pudo caminar otra vez y confesó que a pesar de que ame a los animales, nunca volverá a cometer el mismo error.

Fuente:La neta noticias

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