LA PASCUALITA
Mirá el aterrador video del maniquí que mueve los ojos
La grabación generó todo tipo de especulaciones por parte de los usuarios de redes sociales
México es un país lleno de cultura, historia y tradiciones que se ven reflejadas en las leyendas que hay en diferentes ciudades del país. Es por eso que en esta ocasión te vamos a contar una de las más aterradoras que existen.
Según varios relatos, al norte del país, en Chihuahua, vivió una señora llamada Pascualita. Ella tenía una tienda de vestidos de novia y gala; contaba con una hija y uno de sus sueños era verla usar uno de sus diseños cuando se casara con el amor de su vida.
Al crecer, la joven conoció a un buen hombre que le propuso matrimonio y aceptó. El esperado día llegó, pero ocurrió una desgracia, pues la picadura de un animal ponzoñoso evitó que la chica llegara al altar porque le arrebató la vida.
La desesperación de la madre provocó que embalsamara el cuerpo de su hija y decidió colocarla en el aparador principal de su negocio usando el vestido de novia que ella misma había diseñado.
Desde aquel entonces, las personas visitan la tienda solamente para ver el maniquí, ya que se dice cobra vida por las noches, además de que las uñas le siguen creciendo y cada cierto tiempo deben cortárselas.
Turistas de todo el mundo quedan impactados al conocer la historia que hay detrás de La Pascualita y algunos aseguran que la han podido ver caminar durante altas horas de la madrugada.
En 2017, una grabación compartida en redes sociales generó controversia, pues mostraba el momento exacto en que el maniquí movía los ojos.
En el video se puede ver que una chica está observando su celular, segundos después el joven que está grabando enfoca a La Pascualita y se aprecia que mueve los ojos.
Usuarios de redes sociales tuvieron una opinión dividida; mientras unos aseguran que se puede tratar de un montaje, otros argumentan que es una muestra de que la leyenda del maniquí viviente es completamente real.
Hasta el momento se desconoce la veracidad de la grabación, pero el misterio que encierra a este maniquí está más vigente que nunca.
Fuente:Tiempo de San Juan
