Iglesia ya tiene su propia Secretaría de Minería: “Queremos ser protagonistas en el desarrollo”
Se trata de una iniciativa que busca fortalecer el vínculo con las empresas mineras y promover una mayor participación local en la actividad.
El intendente Jorge Espejo puso en marcha una nueva área estratégica dentro del municipio de Iglesia: la Secretaría de Minería. Se trata de una iniciativa inédita en la historia institucional del departamento, que busca fortalecer el vínculo con las empresas mineras y promover una mayor participación local en la actividad.
Denis Monardes, quien fue designado como secretario del área, explicó que se trata de un paso clave para el futuro de Iglesia. “El intendente tuvo la idea de crear esta nueva área y es un mensaje muy fuerte, porque nunca antes se había creado una Secretaría de Minería en el municipio”, afirmó.
Monardes comenzó sus funciones hace apenas tres semanas y asegura que el objetivo es claro: “Queremos que la municipalidad sea más protagonista. Sabemos que el pilar básico del departamento es la industria minera”.
La nueva secretaría tendrá como ejes de trabajo el seguimiento de la actividad minera en sus distintas etapas —prospección, exploración y explotación— y una interacción activa con las empresas. “Vamos a trabajar en equipo con las demás secretarías para involucrarnos directamente con las compañías que operan en Iglesia. Queremos conocer sus planes de responsabilidad social, sus políticas de contratación y sus necesidades”, destacó.
Entre los proyectos mineros que concentran la atención en Iglesia, el secretario mencionó a Veladero, que lleva más de 20 años en producción, y los nuevos descubrimientos que posicionan a la región como una zona clave para el cobre. “JoséMaría, Filo del Sol y el distrito minero Vicuña han sido destacados a nivel mundial. De hecho, Vicuña está dentro de los 10 distritos de cobre más importantes del mundo”, remarcó Monardes.
“Vamos a poner énfasis en la mano de obra local, en los proveedores de Iglesia y en identificar cuáles son las verdaderas necesidades de nuestros vecinos, para que las empresas puedan contribuir con programas sostenibles”, detalló como objetivos.
Con una trayectoria de más de dos décadas en el sector minero, tanto en el ámbito estatal como en el privado, Monardes concluyó: “Es un camino largo, pero tenemos la decisión y la experiencia para comenzar a construir una relación más directa entre el municipio, la comunidad y las empresas. Si todo sale bien, Iglesia puede convertirse en un modelo de gestión minera con inclusión y desarrollo local”.