Impactante

'Sigo pensando que él no lo hizo', la sospecha del hermano del presunto femicida

La familia de Vilchez cree otra versión de la principal hipótesis del difunto acusado de haber matado a su ex mujer de 15 apuñaladas.
miércoles, 27 de octubre de 2021 · 10:25

En la noche del martes, parte de la familia de Marcelo Vilchez, el difunto y presunto femicida de su ex mujer, Brenda Flores decidió romper el silencio durante el móvil que realizó Paren las Rotativas en el departamento Sarmiento. Sin querer mostrarse e identificarse frente a las cámaras, el hermano del empleado municipal puso un manto de sospecha sobre el móvil de la investigación judicial, ya que para él se trató de un robo donde podría haber participado una tercera persona en la escena del crimen.

El hombre confesó ante las cámaras de Canal 13 que todavía sigue pensando que no fue él. “No lo ha hecho. Falta plata, ella había sacado un préstamo y mi hermano había vendido una moto. Falta plata, falta plata", relató el hermano de Vilchez. 

De acuerdo a las palabras del hombre, la familia cree que hubo una tercera persona en la escena del crimen. Al mismo tiempo afirmó que la pequeña, hija del matrimonio y única testigo, andaba deambulando sola desde el jueves en la tarde. "Para mí no fue como dicen, espero que se descubra la verdad. Para mí no ha sido así. Creo que todo ocurrió el jueves, yo a la nena la vi ese día sola y descalza, por eso me la traje un rato a la casa y le puse los dibujitos", comentó. 

Cabe destacar que hasta el momento el caso está encaminado para que sea archivado, ya que Vilchez, quien le habría propinado 15 puñaladas a la víctima está fallecido. A pesar de ello está previsto que se analicen todas las pruebas recolectadas para establecer lo ocurrido y el motivo que propició la agresión brutal. Fuentes judiciales manifestaron que el cuerpo de Brenda estaba en la habitación de la hija de la pareja, mientras que el cuerpo de Vilchez, que decidió quitarse la vida, estaba en la habitación matrimonial. En ese sentido, informaron que se había ahorcado con alambre y sus restos descansaban en la cama que hasta hace poco había compartido con la víctima fatal.