Es uno de los vendedores más conocidos en el microcentro sanjuanino. A los 15 años ingresó a la Escuela de Mecánica de la Armada, donde se graduó y fue derivado la base de Puerto Belgrano. Tiempo más tarde, sería enviado a Malvinas cuando se desató el conflicto bélico de 1982. A su regreso, no pudo conseguir empleo por lo que vive día a día de lo que vende en la calle.
Es Juan Orlando Barrera y trabaja en la zona del correo. Lo despidieron de un frigorífico, se separó de su mujer y encontró su modo de subsistencia en la calle. Anécdotas con los clientes se entrelazan con verdaderos vínculos de amistad. Un personaje urbano y cotidiano, tan sanjuanino como todos.
Conocido por ser el lustrador de la peatonal, cuenta su historia de sacrificio y auto superación. De origen humilde, desde los 6 años lustra botas y zapatos y trabaja para asegurar el porvenir de su familia. Su máximo sueño es ver a sus hijos recibidos. "Siempre aconsejo a los niños que estudien"
El querido personaje de la Peatonal, donde vive, nos cuenta su historia de vida. Separado, con 7 hijos y cansado de pedir una casa. "Mi meta era ponerme a bailar en un lugar donde pasen música y pegó", relató.