Crónica de una candidatura anunciada

Por Daniel Tejada
Canal 13 San Juan

Ni siquiera el diputado nacional Walberto Allende esperaba semejante tono político. No había previsto que Sergio Uñac fuera a darle tamaño respaldo en su patria chica, el departamento 9 de Julio, la misma semana del decreto de convocatoria a elecciones. Una cosa llevó a la otra. Y el fin de semana la única lectura posible era que el gobernador está resuelto a hacer jugar al ex intendente en la carrera por la recuperación de ese municipio para el peronismo.

Allende había gestionado el apoyo de la provincia para obras en la sede de un centro de jubilados. Muchos adultos mayores esperaban la presencia del gobernador, el pasado viernes, para el acto inaugural. Era una actividad más, en la agenda interminable de Uñac. Pero él se encargó de que el acto tuviera subtexto, cuando puso al legislador nacional en valor como dirigente político.

"San Juan necesita de gente como Allende para dialogar con todo el espectro político nacional para articular las mejores decisiones para todos los sanjuaninos", dijo textualmente el gobernador, para sorpresa del aludido. No se hable más. La decisión del pocitano va encaminada hacia lo que toda lógica indicaba: que el nuevejulino está llamado a dar pelea electoral en el distrito contra Gustavo Núñez el año próximo.

La decisión tiene onda expansiva. Puesta en el tablero de la estrategia electoral para 2019, la candidatura de Allende influye en la negociación con el bloquismo sobre su banca en el Congreso. El año próximo, el 10 de diciembre, terminará el mandato de Graciela Caselles en la Cámara de Diputados de Nación. En su propia hoja de ruta existe la lejana aspiración a repetir por cuarto periodo consecutivo. Pero ella misma sabe que es muy difícil que eso ocurra.

¿Está el bloquismo a un paso de quedarse sin representación en el Parlamento? De ninguna manera. El regreso de Allende a 9 de Julio traería aparejado el ascenso del joven Luis Rueda, colaborador directo de Uñac y símbolo de la renovación bloquista. Es el nombre que sigue en la lista de diputados nacionales electos en 2017. Si el nuevejulino resultara electo intendente, tendría que renunciar a la banca y dejarle ese lugar por los dos años que restan de mandato al dirigente del partido de la estrella.

Para Rueda, sería el debut en las ligas mayores. Dejaría de ser el subsecretario de la Unidad Gobernación, virtual secretario privado de Uñac, para ganar protagonismo en las votaciones del Congreso. Dos años serán suficientes para que aparezca en el registro de los electores que aún pudieran no conocerlo con nombre y apellido. Un escaño en la Cámara Baja reporta, entre otros importantes beneficios, las apariciones públicas en los diarios.

Con Rueda en el mapa, Uñac podría sacarse de encima la presión bloquista de figurar en la lista de diputados nacionales para el segundo semestre de 2019. El primer candidato, en principio, sería José Luis Gioja. El gobernador dijo tiempo atrás en Radio Sarmiento que si el presidente del PJ a nivel nacional quiere repetir, sería natural que lo hiciera. Habrá que buscar a una mujer y otro varón para completar los lugares titulares. Como se dijo, conformando al cantonismo con la promesa de Rueda.

Lo de Allende queda cada vez más cerca de ser la crónica de una candidatura anunciada. Su salida eventual del Congreso podría repercutir negativamente para Uñac porque en el nuevejulino encontró un útil operador, dispuesto a poner el cuerpo aún cuando las votaciones lo dejaran en situación de ser criticado. Con varios años menos, el bloquista podría arrimarse a esa función. Está dispuesto, de eso no quepan dudas.

JAQUE MATE