¿Y ahora?

Por Daniel Tejada
Canal 13 San Juan

Vamos a sacarle el género a la fuente. Digamos que fue un alto funcionario del gobierno provincial, sin más especificaciones, porque en realidad fue una conversación off the record. En esa charla, nuestro informante reveló una preocupación asociada a los momentos de desastre económico que vive el país y que atraviesa transversalmente a la provincia de San Juan, también.

Dijo que esa preocupación radica en manejar escrupulosamente las declaraciones públicas, para no empeorar el clima de negocios que medianamente intentan conservar en estas tierras. La difusión de noticias negativas sobre empresas en procedimiento preventivo de crisis, despidos o retiros voluntarios, espanta cualquier eventual inversión y dificulta todavía más la solvencia de estas empresas -pymes en su mayoría- en su relación con los bancos.

Pasó días atrás. En una radio local se planteó que una histórica industria estaba al borde del cierre. El propietario de la firma se comunicó de inmediato con las autoridades del Ministerio de la Producción, para pedir discresión, primero porque no es una situación definitiva y luego porque ningún banco le prestaría financiamiento si se genera una imagen de Titanic en pleno hundimiento. Es puro sentido común.

Esta reflexión surgió apenas un día antes del anuncio de las medidas del gobierno de Mauricio Macri, que pretenden dar "alivio" a la ciudadanía, agobiada por los tarifazos y la inflación galopante. Costó y costará tremendamente encontrar a alguien que defienda la batería de propuestas populistas de parte del equipo que llegó al poder defenestrando al populismo. Dicho de otra manera: las medidas del macrismo son flagrantemente un intento electoral por congraciarse con la opinión pública hasta octubre. Y después, que pase lo que tenga que pasar.

En esta tarea de encontrar a alguien que banque las medidas de Macri y su equipo de CEOs-ministros, se cuela otra inquietud, atada a la anécdota del funcionario provincial: la incertidumbre, la falta de credibilidad en la figura presidencial y un horizonte borroso, cuando apenas pasamos el primer trimestre y el 2019, que empezó cuestas arriba, se convirtió en un murallón para escalar.

Aplica al gobierno nacional la misma consigna que para la industria sanjuanina, esa de no generar más pesimismo que el que ya tenemos impregnado, porque ninguno es ajeno a la realidad. La confianza que supo tener Cambiemos en el inicio de la gestión, que revalidó en las elecciones legislativas de 2017 a nivel nacional, hoy está deshilachada. Y no es una buena noticia, para ninguno de nosotros. Al fin y al cabo, de uno y otro lado de la grieta, la suerte de todos nosotros está atada a la administración macrista.

Nos asalta un manojo de preguntas que bien podrían resumirse en una sola: ¿y ahora?. Ya no se trata de criticar al gobierno de turno, ni sentar posición acerca de medidas controversiales. El manotazo político quedó al desnudo y el futuro, no para un partido político o un dirigente, sino para todos nosotros, pende de un hilo. Asusta, sobre todo a los que ya pasamos por momentos muy parecidos, en la historia reciente argentina.

JAQUE MATE