La montaña va a Mahoma

Por Daniel Tejada
Canal 13 San Juan

Si Mahoma no va a la montaña, la montaña va a Mahoma. El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, estampó ayer el apoyo de la Casa Rosada para uno de los dos precandidatos a diputado nacional del Frente Juntos por el Cambio. No fue el radical Eduardo Castro, que incluyó en su lista al PRO y fue a buscar la foto con el funcionario nacional en Pocito.  El destinatario del respaldo fue el esquivo Marcelo Orrego, a domicilio, en su propio despacho municipal en Santa Lucía.

Hasta allá fue el ministro del Interior tras haber firmado el contrato de inicio de obra del dique El Tambolar, para manifestar públicamente su apoyo al jefe comunal que hace apenas un mes atrás hizo campaña despegándose de la Casa Rosada. Orrego viró su discurso y volvió sobre sus palabras para buscar ubicación en la grieta. Y, puesto a elegir, prefirió renovar su alianza con el macrismo. Le facilitó la decisión la incorporación del senador Miguel Pichetto a la fórmula presidencial.

De esta manera, Frigerio hizo este miércoles lo que la Casa Rosada no había podido durante toda la campaña provincial: sacarse una foto junto a Orrego. Es el dirigente opositor y filomacrista mejor posicionado en San Juan, entendiendo que el justicialismo resulta imbatible tras los 56 puntos logrados por Sergio Uñac en las elecciones provinciales.

En este contexto, los 34 puntos del santaluceño lo hacen lucir muy dignamente como contrapoder en la provincia. Visto desde la Casa Rosada, sostener ese número en las elecciones presidenciales en un distrito discreto en padrón pero simbólico desde lo político, podría resultar atractivo. Dicho de otra manera: el 27 de octubre próximo, la Casa Rosada podría contar con una banca ganada, la de Orrego, en la suma de los guarismos.

¿Orrego se sumaría al bloque de Juntos por el Cambio en la Cámara Baja, llegado el momento de asumir? Muy difícilmente. Pero, a semejanza de su mentor político Roberto Basualdo, aún con identidad provincial con el sello de Producción y Trabajo, el macrismo los contará como aliados. En un marco de tanta estrechez de números, basta y sobra.

Es verdad, por otro lado, que Frigerio es el dirigente de Nación que mejor dialoga con los sectores filoperonistas. Es y siempre fue el único con línea abierta incondicional con los gobernadores. Orrego también comparte idioma con el ministro del Interior.

No resultó inocente tampoco la presencia del intendente electo, Juan José Orrego, en esa cumbre con Frigerio, en la que también estuvo el diputado Eduardo Cáceres. 

"Canqui" también jugará un partido especial en favor de su hermano y la fórmula presidencial, porque lo único que sabe es que le tocará asumir el 10 de diciembre y tener un gobierno afín en la Casa Rosada le podría facilitar mucho las cosas. Como ejemplo alcanza revisar la ayuda que recibió Marcelo en este segundo periodo que llega a su fin.

Luego estuvo el discurso compartido y coordinado en tono de campaña, acerca de no volver al pasado. Orrego y Frigerio, cada uno en su momento, uno al lado del otro, repitieron la consigna, con la claridad de apuntar al electorado duro anti-k.

Resultó entonces, que nunca estuvieron tan alejados, aunque Orrego parece haber redefinido los términos de su relación con el macrismo. Ya no es a través de Basualdo. Ni de Cáceres. Hay que ir a Santa Lucía. Y si Mahoma no va a la montaña... Frigerio va a donde sea necesario.

JAQUE MATE