Crece el malestar por las presiones de Lundin para invertir en Josemaría

Josemaría es más que una promesa, es un megaproyecto de cobre, el primero en su tipo en San Juan. Prácticamente quintuplica a Veladero en inversión y en demanda de mano de obra. Además, es alentado por un interesante precio del cobre a nivel internacional, con la tendencia en alza del mercado por la electrificación en la industria automotriz y otros rubros.

Ahora, mientras avanza la evaluación del informe de impacto ambiental que fue presentado el año pasado, se generó una nueva controversia. La empresa, quiere que el Gobierno Nacional firme un convenio que le garantice seguridad jurídica para realizar la inversión.

Esta nueva condición no cayó del todo bien a las autoridades del Gobierno provincial que tiene gran expectativa en este proyecto.

Todo surgió en una entrevista que el gerente general del proyecto, Alfredo Vitaller, brindó a Diario de Cuyo, donde se refirió a esta nueva pretensión. En la misma sostuvo que la empresa va a necesitar el compromiso firmado por Nación para realizar la inversión.

Este tipo de condición es inédita para una empresa que se encuentra en una instancia tan avanzada para iniciar con la explotación del proyecto. Cabe recordar que Josemaría presentó su informe de impacto ambiental durante el primer semestre del 2021 y todavía se encuentra en evaluación por parte del Estado, que ya solicitó algunas modificaciones y mejoras.

 Lo cierto, es que este requisito cayó como una bomba en San Juan. Primero porque Nación no es la dueña del proyecto, sino la provincia. Y segundo porque la empresa se tiene que ajustar las leyes vigentes, no venir a pedir desde afuera condiciones legales y jurídicas.

Si bien, Argentina en su historia reciente ha tenido muchos vaivenes jurídicos, es un país soberano. Y que una empresa de capitales privados se plante y pise una inversión, presionado a la Provincia con que si Nación no firma no hay inversión, es grave.

Josemaría es una de las grandes apuestas de la provincia de San Juan. Es una inversión de 4.100 millones de dólares que generará por lo menos 10.000 puestos de trabajo directo y esto se multiplica por los empleados indirectos. Si Veladero movió la aguja de la economía y se notó, como así también se notó cuando frenó su producción. Las expectativas por Josemaría son aún mayores.

El ministro de Minería de San Juan, Carlos Astudillo, habló sobre el tema en Banda Ancha y dijo que las condiciones las pone la provincia y la sociedad sanjuanina. Lo que quiso decir es que las condiciones no las pone la empresa, sino que son las que están. Y se va a exigir el cumplimiento de la normativa vigente, de las normas ambientales, de sustentabilidad y sostenibilidad. En este sentido, aseguró que hay seguridad jurídica para invertir en San Juan y no se espanta a ningún inversor.

Mientras tanto, crece el malestar por las presiones sin precedentes de la empresa.