¿De qué lado están?

Iba a suceder eventualmente y está pasando. De manera precipitada por la implosión de Juntos por el Cambio, el presidente del PRO en San Juan, Enzo Cornejo, anticipó su apoyo a Horacio Rodríguez Larreta para la campaña presidencial. En el acto le dio la espalda a Patricia Bullrich. 

En cascada deberían escucharse definiciones similares hacia uno u otra porque -como dijo Cornejo este martes en Banda Ancha- se terminó el tiempo de los grises. Buenos Aires empezará a demandar gestos de acompañamiento para exhibir fortaleza ante los rivales internos. Para Larreta será imprescindible esta construcción si quiere resistir el embate de los halcones.

Pero no es una cuestión exclusiva ni excluyente de la oposición. Al oficialismo también le llegará la hora de reclutar adhesiones para una grilla de presidenciables que no está clara. Hay nombres sugeridos, alguno que levanta la mano en calidad de amague, pero nada más.

Sin embargo y pese a la precariedad del escenario, la diputada nacional Graciela Caselles también marcó una postura contundente este martes en Banda Ancha. 'Si Sergio Massa es candidato a presidente, personalmente lo voy a acompañar', dijo la dirigente bloquista. En su partido son varios los que esperan una señal del ministro de Economía para actuar en consecuencia.

Hasta ahora Massa ha dicho que no, porque es incompatible ser ministro de Economía con montarse en una candidatura presidencial. Pocos le creen. Si llegara a moderar la escalada inflacionaria, automáticamente se convertiría en la figura posible dentro de un oficialismo maltrecho. Lo sugirió el propio José Luis Gioja el pasado martes 4 de abril en Banda Ancha.

Mientras tanto, estarán cruzando los dedos en Casa de Gobierno para que Alberto Fernández se abstenga de lanzar candidatura antes del 14 de mayo. Si algo no está necesitando el peronismo sanjuanino ahora, es la incómoda pregunta: ¿apoyaría Sergio Uñac la reelección del presidente? 

Incómoda o no, la pregunta sería obligatoria. Y la respuesta posiblemente requeriría una destreza olímpica para no quedar pegado a las desventuras de Alberto a 32 días de la votación en San Juan.

Gioja, que no carga con la responsabilidad de gestionar la provincia ni cuidar la delicada relación con la Casa Rosada, ya le bajó el pulgar a Fernández. En Banda Ancha dijo que el presidente debería ponerse por encima de las candidaturas para cohesionar a todos y todas.

Pero Uñac no haría declaraciones tan libremente. Podría pagar el costo de un desaire semejante. Y cuando Nación se molesta, la provincia paga las consecuencias. Antecedentes sobran.

Por lo tanto, la mejor hipótesis para el Frente San Juan por Todos siempre será que Alberto demore su definición hasta la segunda quincena de mayo por lo menos. Pasada la elección provincial las distintas variantes del peronismo podrán acoplarse a las vertientes nacionales de acuerdo al criterio de cada uno.

En este sentido, los justicialistas cuentan con una ventaja comparativa con respecto a Juntos por el Cambio. En el PRO la disputa se precipitó. En el Frente de Todos los caciques nacionales jugarán con los tiempos hasta el filo del cierre de listas. Eso será el 24 de junio.

Esta lectura sobre la ventaja comparativa merece una explicación. Como ya se dijo, que Alberto demore su definición le genera un alivio a Uñac. Pero la guerra despiadada entre Larreta y Bullrich le mete presión a Marcelo Orrego.

El candidato a gobernador mejor rankeado dentro de la oposición tiene una evidente afinidad con Larreta pero ha guardado las formas. Poco y nada le serviría espantar el voto halcón que prefiere a Bullrich. Definirse tan prematuramente por el Jefe de Gobierno Porteño no parece aconsejable.

Lo nacional puede esperar, ciertamente. Sin embargo, la lucha porteña terminó salpicando hacia todos lados. Por eso Cornejo debió salir a marcar posición con la contundencia que no había mostrado hasta ahora. 

Siendo el presidente del PRO en San Juan, su declaración en Canal 13 no fue aleatoria. Hubo premeditación y coordinación. Cuesta imaginarlo hablando a espaldas de Orrego o sin haber tenido previamente algún guiño desde CABA.

'Acá se terminaron los grises, es blanco o negro', dijo Cornejo en Banda Ancha. Menudo reconocimiento. Lo primero fue admitir que venían jugando a la indefinición. Lo segundo, que ya no hay margen para hacerse el distraído. 

'Estoy convencido de que a fin de año Rodríguez Larreta será el presidente de todos los argentinos', sostuvo el diputado del PRO. ¿Cómo será su próxima conversación con Patricia luego de esta declaración? La entrevista de Banda Ancha rápidamente saltó a Buenos Aires. Para Horacio será una cucarda.

Cornejo integra la lista de diputados proporcionales que armó Orrego. Por lo tanto, el legislador podría funcionar como una válvula para aliviar la presión sobre el candidato a gobernador. Pero Marcelo tendrá que hacerle frente a algún micrófono en el desarrollo de la campaña. Y la pregunta será natural. ¿De qué lado está? La respuesta estará cantada. Igualmente deberá salir de su boca.

En este tembladeral hay una constante: la altísima volatilidad del escenario político nacional. Para las primeras figuras de San Juan, son tiempos de mucha cintura y la guardia en alto.

JAQUE MATE