A comienzos de 2025, varias personas llamaron al 911 para realizar denuncias que causaron sorpresa. Estas personas aseguraban haber visto un mono en los árboles de la Plaza de Trinidad. Esto se confirmó y, luego de un día de trabajo, los especialistas pudieron rescatarlo. Ahora, a casi 6 meses de que todo sucediera, surgió la pregunta: ¿qué pasó con este animal?

Aldo “Pirata” Olivares, el veterinario que participó en el rescate, contó a Diario 13 cómo pasa sus días esta mona tití pincel cara negra. El especialista contó a este medio que ella sigue dentro de un santuario ubicado en Santa Lucía, ya que actualmente no es posible regresarla a su hábitat: el Amazonas.

“Está en la granja Tierras Blancas. Es un santuario animal, un centro de rehabilitación, recuperación y reinserción para, en el caso de ser posible, animales salvajes, tanto exóticos como autóctonos. Los que no se pueden reinsertar en su medio, quedan ahí dándole todas las condiciones necesarias”, manifestó.

Olivares reveló que, a pesar de las bajas temperaturas que viene registrando la provincia, ella se encuentra en muy buen estado. Esto se debe a que se ha instalado un sistema de calefacción para los animales que están en ese lugar.

“Está en perfecto estado, se está adaptando perfectamente bien al recinto donde está. Se le ha puesto calefacción igual que a los otros monos, tiene una entrada hacia el interior del galpón calefaccionado, porque tiene que tener temperatura adecuada. No tiene problemas, está perfectamente bien”, expresó.

Por último, “el pirata” contó un detalle importante sobre la vida actual de este animal. Se trata de que tiene la oportunidad de convivir con otros dos monos; si bien no están juntos, están prácticamente uno al lado del otro dentro de esta granja.

“La monita que había en la plaza es un mono tití pincel cara negra. En el recinto de al lado hay dos monos tití pincel cara blanca. Son subespecies distintas y son de zonas muy diferentes. Conviven perfectamente, pero están separados por un alambrado, en el recinto externo y en el interno. Se ven, se tocan, se huelen. Es para que se acostumbren, se adapten y se hagan familia en lo posible”, sentenció.