PRIMER DIA

La elegancia y calidad del paso del Caballo Peruano cautivó en Albardón

Fue en el marco del XXVI Concurso Regional de Caballos Peruanos de Paso donde participaron 200 equinos locales y de otras provincias. El primer día de este certamen tradicional fue todo un éxito, según la organización. Este domingo el cierre de la tradicional competencia será con la exquisita actuación de un grupo de mujeres, esposas e hijas de criadores, llamadas Estirpe Salteña.
sábado, 15 de marzo de 2014 · 21:31
La finca Doña Antonia, en Albardón, fue el escenario principal donde los caballos fueron la principal atracción y se ganaron el aplauso del público en una nueva edición del Concurso Regional de Caballos Peruanos de Paso. Más de 200 caballos participaron de este certamen que adquirió a través de los años nombre propio a nivel nacional.  Hubo venta de comidas típicas, artesanías y accesorios para los equinos. Las bodegas locales también tuvieron su espacio con degustaciones.
La calidad de los animales fue el sello distintivo del concurso de caballos peruanos de paso comentaron desde la organización. El presidente de la AACCPP (Asociación  Argentina de Criadores de Caballos Peruanos de Paso) Leopoldo Van Couwlaert comentó a CANAL 13 que este año la cantidad de participantes es superior a la edición del año pasado, y cada vez más son los criadores que llegan de otras provincias.  Destacó además la atracción  turística que implica un certamen de estas características en la provincia.  Los ganadores de este certamen participarán de forma directa en el concurso nacional que se realizará en el mes de mayo en la provincia de Salta. 
El caballo Peruano es un animal  de silla del tipo mediolíneo liviano, mesomorfo, con una alzada que de acuerdo al patrón de la raza varía de 1,40 m a 1,52 m para las hembras y de 1,45 m a 1,53 m para los machos. Sus aplomos deben ser normales o correctos, con un ligero acomodamiento en su coberjón, una cabeza con ojos vivaces y orejas chicas. Es de un temperamento fogoso, aunque de gran nobleza y mansedumbre. Su característica fundamental reside en la mecánica del movimiento o "aires" al andar, al que se denomina "Pasollano", que lo hacen único en su tipo por la suavidad con que transporta al jinete. El pasollano consiste en una ambladura rota donde el caballo apoya sus cascos en el piso en cuatro tiempos isocrónicos, siendo el orden de sus batidas: posterior izquierdo – anterior izquierdo, posterior derecho – anterior derecho, y así sucesivamente, lo que puede sintetizarse en la frase: "movimiento a bípedo lateral consecutivo dominante".

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