Un drama repetido: "Si me acerco a mi esposa, mi perro me ataca"

Caso que parece cómico pero que puede traer muchos problemas, más aun si se trata de un perro de mediano y gran porte. Se trata de una consulta recurrente dentro del ámbito familiar, cuando alguien se acerca al dueño del perro, el can se pone en actitud agresiva y puede atacar a los miembros de la familia.

Por el caso, el conductista canino, Roberto Bastianelli dialogó con Banda Ancha y brindó un ejemplo de lo que parece ser un drama repetido. Se trata de una pareja que trabaja todo el día, ambos llegan a la noche cansados a cenar, una ducha antes de acostarse. “Luego de bañarse ella se acuesta, el perro se sube arriba de la cama”, relató Bastianelli. En cuanto el hombre se quiere acostar en la cama, al lado de su señora, el  perro lo ataca y le impide que se acueste.

“Este es un tema que se ha reiterado mucho, yo lo quería tomar. La causa de todo esto es cuando le cambian la especie del perro, cuando tratan al perro como humano. El antropomorfismo, el síndrome de humanización del perro”, explicó el conductista.

Esto sucede, según aclaró, porque se le permite al perro tomarse atribuciones que no le corresponden, como dormir al lado de la señora. “Lo que piensa el perro es que ella es su hembra, y no debe acercarse nadie”, aseguró.

Esta cuestión que parece tan cómica crea todo un conflicto. Muchas veces puede suceder  entre los integrantes de la casa, también hacia niños que se quieren acercar a u mama y el perro le pone límites o con visitas. Si el perro es grande puede ocasionar problemas serios, es un tema para tratarlo seriamente que puede lastimar a un miembro de la familia, a un niño o a un visitante.

Bastianelli dijo que la clave es recordarle al perro el lugar que le pertenece, “el perro es un perro y no por eso lo vamos a castigar o maltratar. Cada uno en la manada del perro tiene su escala jerárquica y ninguno se osa ocupar el lugar del macho alfa”, finalizó.