Cómo nació la expedición al Cerro Mercedario donde murió Paty Altamirano

1981, una época en la que los relatos de la expediciones en alta montaña llegaban a los oídos en cómo cuentos fantásticos, alguna emisión casual de radio, fotos en revistas, un incomprobable y escaso lugar en la TV sin programas especializados y sin el universo de internet al alcance de la mano. El viaje a San Juan de dos tucumanas y un italiano se cocinó al calor de un auge en la actividad en la que predominaban, más que hoy, los varones  y en el ocaso de la dictadura militar. 

Miembros de del Club Andino Tucumano, Corina y  Marta Emilia “Paty” Altamirano, se desempeñaban activamente en la institución donde se tomaron contacto con andinistas europeos, entre ellos Sergio Bossini quien cargo junto a Corina el peso de haber perdido a un ser querido en la montaña. 

“En esa época en la que había un gran auge del montañismo, mucha gente de la provincia y también del norte salían”, dijo la entrevistada. Antes que aquel trágico 23 de marzo ya habían realizado algunas a hazañas en el Cerro Chañi, el más alto de Jujuy, y en otra ocasión también por la pared sur. 

Fueron a los Nevados de Aconquija, cuyas tres cumbres son los principales puntos más altos de la provincia, por encima de los 5000 metros sobre el nivel del mar. Conociendo como la palma de la mano cada cerro de Tucumán. “Con Sergio Bossini habíamos subido el Chañi por la pared sur”.

Al respecto hablo sobre la decisión de escalar el Mercedario, un desafío verdaderamente imponente, “habíamos estado leyendo muchos sobre el viaje de los polacos. En esa época nos reuníamos una vez a la semana y se pasaban diapositivas sobre excusiones viejas y nuevas, de distintos cerros y nos entusiasmó la belleza del lugar”. 

De acuerdo con su relato, vivieron la muerte de su hermana fue el inicio de una pesadilla, ya que luego de bajar del cerro, con la desolación de haberla encontrado muerta y no haberla podido bajar, los sobrevivientes fueron tratados de inexpertos y acusados de homicidio.

Sin embargo, Corina no dejó que este hecho que marco para siempre su vida y la de su familia la alejara de las montañas, ya que en algunas ocasiones volvió a hacerlo incluso embarazada. “Si vos estas en una actividad buscas siempre otros desafíos y conocer otros lugares, teníamos planeado ir a Cachi y al Aconcagua”. Ahora a sus 63 años ejerce la docencia. 

Corina viajará nuevamente a la provincia, luego de haber intentado en otra ocasión por si misma rescatar el cuerpo de Paty. Esta vez con sus otros tres hermanos, que en principio se iba a ser con la muestra de ADN del padre, pero decidieron hacerlo de una forma más “correcta”, en palabras de la entrevistada. "Lo vamos a Hacer por los medios de la Justicia". La muestra se realizará mañana en la mañana y directamente desde el laboratorio lo traerán a San Juan para contrastar con el ADN del cuerpo encontrado en alta montaña.