Dolor y reconocimiento desde la comunidad judía tras la muerte del Papa Francisco
Desde la Sociedad Israelita de Beneficencia, destacaron el legado del pontífice en materia de diálogo interreligioso, paz y justicia social. "Todos somos hermanos", recordaron como uno de sus mensajes más poderosos.
El director comunitario de la Sociedad Israelita de Beneficencia, Ary Sermana, expresó su pesar por la muerte del Papa Francisco y destacó su legado como promotor del diálogo interreligioso y la unidad entre los pueblos.
"Con profunda tristeza, despedimos a un papá que nos incluyó a todos, no solo por ser argentino, sino por su trabajo incansable en favor de la unión de los pueblos", señaló Sermana en diálogo con Jorge por la mañana.
Aunque desde la institución no se organizaron actividades específicas, miembros de la comunidad participaron en la misa en la Catedral como gesto de apoyo y reconocimiento.
Subrayó el compromiso de Francisco con el diálogo entre credos y su búsqueda constante de un mundo más justo y digno, especialmente para los sectores más vulnerables. "Él transmitía que todos tenemos un mismo fin: vivir en paz, en hermandad, y entender que más allá de nuestras creencias, todos somos iguales", sostuvo.
Entre los puntos que resaltó de su papado, mencionaron los cambios significativos dentro de la Iglesia católica y su incansable defensa de la paz mundial. "Buscó que, desde nuestras diferencias, podamos construir un mundo mejor", concluyó.