Ubicado en Villa Centenario, Chimbas, el comedor Rayito de Luna atraviesa un momento crítico. En la actualidad, ellos brindan asistencia a 35 niños y varios adultos mayores, pero el espacio físico es insuficiente y las dificultades económicas impiden continuar con la ampliación. Su presidente, Walter Szegedy, charló con el móvil de Canal 13, e hizo un llamado a la comunidad para colaborar con materiales de construcción.

“Llevo más de cuatro años trabajando con chicos y abuelitos, pero hoy me duele decir que tenemos que parar porque no tengo ayuda del gobierno”, expresó Szegedy. Según contó, ya iniciaron una obra para agrandar el comedor, pero no pueden continuar por falta de recursos. “Lo que más necesitamos es el techo y el contrapiso. El lugar ya nos quedó muy chico para las 40 personas que vienen”, agregó.

A pesar de las dificultades, el referente barrial destacó que ya comenzaron a recibir ayuda solidaria. “Me donaron una puerta y hay vecinos que se están sumando", detalló. Pero sabe que hay mayores necesidades en la comunidad: "Es que hay chicos que no tienen ni para comer, ni una sopa, ni zapatillas. Cuando los ves llegar al comedor te parte el alma”, dijo.

El proyecto va más allá del alimento: Walter sueña con un espacio integral. “Estoy hablando con profesionales para que también funcione como centro odontológico. El director de Odontología me ofreció su ayuda. También tenemos profesores de música, peluqueros y otros vecinos que quieren colaborar. La idea es contener y dar herramientas”, detalló esperanzado.

Para finalizar la ampliación, Szegedy detalló que necesitan:

  • 12 palos rollizos para el techo
  • 54 metros de machimbre
  • 5 rollos de membrana
  • 10 bolsas de cemento
  • Puertas, ventanas, sillas, vasos y platos

Quienes deseen colaborar pueden comunicarse al 264 522 2012, o acercarse al comedor ubicado en Monseñor Gallardo 231 Este, entre Gobernador Rojas y callejón Gálvez, en Villa Centenario. “San Juan es solidaria, siempre lo ha sido. Solo pido una mano para seguir ayudando a los que más lo necesitan. Lo hacemos con el corazón, y cada aporte suma”, concluyó Walter.