El ciclón que dejo con muchas personas afectadas en Chile, marcó una reflexión en San Juan sobre el tema de las construcciones. Por este motivo Canal 13 charló con el director del Instituto Nacional de Prevención Sísmica (INPRES), Ing. Rodolfo García, que aclaró que  en la actualidad muchos usan construcciones mas económicas pero a la vez suelen no ser seguras. 

“La construcción tradicional se ha encarecido notablemente. Hay quienes buscan opciones más baratas, pero no siempre seguras. Por eso desde el INPRES queremos alertar sobre los riesgos de construir sin planificación ni asesoramiento técnico”, advirtió el profesional.

El ingeniero explicó que si bien una construcción no tradicional puede ser más accesible en el corto plazo, a largo plazo puede significar más gastos debido al deterioro y las fallas estructurales. “Hay que diferenciar entre el costo inicial y el costo total en el tiempo. Una casa más económica puede terminar siendo más cara si no resiste bien los embates del entorno”, subrayó.

Estas En torno a las construcciones livianas tienen ventajas y desventajas. “Al ser más livianas, generan menos fuerza de inercia en caso de sismo. Eso es positivo en zonas sísmicas como San Juan. Pero al mismo tiempo, son más vulnerables frente al viento, ya que pueden sufrir succión o presión que comprometa la estructura, sobre todo en techos de chapa o madera”, detalló García.

El ciclón que se produjo en el sur de Chile afectó mayoritariamente a casas hechas con este tipo de materiales. Según el especialista, se trata de una región donde es común construir con sistemas livianos por cuestiones climáticas y económicas. “En algunos países acostumbrados a este tipo de ciclones, como Estados Unidos, las viviendas livianas se combinan con refugios subterráneos de hormigón, donde la gente se protege cuando hay alerta de tormenta. Eso no ocurre aquí”, señaló.

Certificados de aptitud sísmica: una herramienta clave

Desde el INPRES, el organismo nacional con sede en San Juan, se realiza un seguimiento de los nuevos sistemas constructivos. “Estas viviendas, si están bien diseñadas y construidas correctamente, pueden ser válidas. Para ello, deben pasar por un estudio de aptitud sismorresistente. Si cumplen, se les otorga un certificado oficial”, precisó García.

Ese certificado es esencial para quienes eligen sistemas alternativos, como placas cementicias o estructuras prefabricadas en madera. Y agregó: “La persona interesada debe exigir a la empresa constructora ese certificado. De lo contrario, está confiando su seguridad a una estructura que no ha sido evaluada”.

La aparición de nuevos materiales y tecnologías en el ámbito de la construcción es constante. “Hoy en día se trabaja con paneles que incluyen poliuretano expandido, que mejoran la aislación térmica, por ejemplo. No hay que descartarlos, pero sí asegurar que todo esté bien calculado y adaptado al tipo de amenaza que enfrenta cada zona: sismos, viento, nieve o fuego”, expresó el director del INPRES.

Finalmente, García recordó que no existen materiales sismorresistentes por sí solos. “La resistencia depende del diseño, del cálculo estructural y de una ejecución adecuada. Si esos factores están contemplados, no hay por qué desconfiar de un sistema constructivo moderno. Pero si se omiten, la seguridad de las personas puede estar en riesgo”.