Preocupación por el futuro del INTI: "Centralizarlo no hace más que burocratizar la industria"
El exvicepresidente del Instituto Nacional de Tecnología Industrial, Jorge Schenebelli, advirtió en Canal 13 sobre los efectos negativos que podría tener la pérdida de autonomía del organismo
En medio de un contexto de reformas estructurales impulsadas por el gobierno nacional, el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) aparece una vez más en el centro del debate. Esta vez, la preocupación se enciende ante la posibilidad de que pierda su carácter descentralizado, lo que podría derivar en una profunda modificación en su funcionamiento.
El exvicepresidente del organismo, Jorge Schenebelli, dialogó con Canal 13 y expresó su rechazo ante esta posibilidad. “La modificación de la estructura del INTI echa bajo tierra convenios con 70 países”, afirmó.
Desde diciembre de 2023, el INTI sufrió una reducción de su planta de personal, pasando de 3.000 a 2.200 trabajadores. Esta pérdida responde, en parte, a retiros voluntarios impulsados por la caída del poder adquisitivo. “Ya venimos con serios problemas de presupuesto. Las condiciones salariales y laborales han empujado a muchas personas a abandonar el instituto”, explicó Schenebelli.
La situación se agravó con las declaraciones del ministro Federico Sturzenegger, que dejó entrever la intención de reorganizar el esquema institucional de organismos científicos y técnicos. En ese marco, el INTI podría pasar a depender directamente del Ministerio, perdiendo su condición de organismo autárquico.
“Centralizar el INTI no hace más que burocratizar la industria. Nosotros brindamos asistencia técnica, realizamos ensayos, capacitaciones, investigación y desarrollo. Todo eso requiere decisiones rápidas, firmar convenios, responder con agilidad. Si cada trámite tiene que pasar por un ministerio, la respuesta será lenta, ineficiente”, advirtió.
Un instituto clave para la industria nacional
El INTI fue fundado hace casi 70 años y tiene presencia en todas las provincias del país. En el Parque Tecnológico Miguelete, en Buenos Aires, se concentra la mayor parte de sus centros de investigación, pero su estructura federal le permite estar cerca de las necesidades industriales en cada región.
“El INTI es el organismo rector en metrología. Todo lo que se mide, desde los surtidores de nafta hasta los granos que se exportan, pasa por nuestros controles y debe tener trazabilidad. Si se eliminan convenios y se demora la intervención del Instituto, el país podría tener serias complicaciones en materia de comercio internacional”, sostuvo Schenebelli.
Actualmente, el INTI mantiene vínculos de cooperación con más de 70 países. “Muchos de nuestros servicios están reconocidos internacionalmente. Si dejamos de ser autónomos, esos acuerdos entran en conflicto jurídico y técnico, y podrían romperse”, explicó.
A comienzos de esta semana, trabajadores y profesionales del INTI de distintas regiones del país elevaron una nota al Consejo Directivo expresando su disconformidad con la idea de centralizar el organismo. “Fue un gesto importante. Son personas con trayectoria, formadas dentro del instituto, que comprenden en profundidad su funcionamiento y la necesidad de defender su autonomía”, destacó el exvicepresidente.
La preocupación se replica en todo el espectro institucional. “Estamos buscando hablar con todos los bloques legislativos, tanto del oficialismo como de la oposición. La idea es explicar por qué esta medida es perjudicial no solo para el INTI, sino para la industria nacional y la sociedad en general”, agregó Schenebelli.
Pese a que el año pasado, gracias a gestiones legislativas, se logró que el INTI no figurara en el listado de organismos a cerrarse, eso no impide que el Ejecutivo avance con una reestructuración profunda. “La Ley Bases delegó muchas facultades, y si bien el Congreso puede rechazar decretos, vivimos en un clima de incertidumbre”, explicó.
Consultado sobre la actitud de las actuales autoridades del Instituto, Schenebelli fue cauto: “Hay muy poca información oficial. No se sabe con certeza qué va a pasar, y eso genera una gran inestabilidad. Muchos de quienes hoy tienen responsabilidades dentro del INTI no conocen su historia ni su funcionamiento. Eso complica aún más cualquier intento de defensa desde adentro”.
El INTI cuenta con más de 50 centros especializados que abarcan desde la biotecnología hasta la mecánica, la construcción, la electrónica, la industria alimenticia y la prevención de incendios, entre otros. Cada área requiere equipos profesionales formados, decisiones ágiles y coordinación técnica.
“Pensar que centralizar va a mejorar el funcionamiento es desconocer cómo trabaja el INTI y cómo funcionan los organismos similares en el mundo”, sentenció Schenebelli. “Es un orgullo argentino, reconocido en toda América Latina. Si lo debilitamos, no solo se perjudican los trabajadores, se perjudica el país entero”, concluyó.