MUNDO

Obreros rumanos que construyeron la nueva sede de la OTAN demandan a contratistas por impago de salarios

La compañía que contrató a los empleados prometió pagarles tres meses después del comienzo de la construcción, pero al expirar ese plazo siguió aplazando el pago hasta que se declaró en bancarrota.
domingo, 22 de septiembre de 2019 · 14:29

Un grupo de obreros rumanos de la construcción ha demandado a sus contratistas por impago salarial durante varios meses mientras trabajaban en la construcción de la nueva sede de la OTAN en Bruselas, que fue inaugurada en mayo de 2017, informa el medio local RTBF.

La compañía que contrató a estos empleados prometió pagarles tres meses después del comienzo de la construcción. Sin embargo, al expirar ese plazo, la empresa aplazó el pago con distintos pretextos y después se declaró en bancarrota.

Según el abogado de los obreros, Jehan de Lannoy, este tipo de uso indebido de la fuerza laboral a veces ocurre en proyectos grandes. En este caso, el proceso se convierte en una especie de pirámide, cuando un consorcio obtiene el permiso para la construcción del edificio y después divide el proyecto en varias partes, recurriendo a empresas subcontratadas.

En el caso de la construcción de la sede de la OTAN, la compañía MTB Slovenia ganó una licitación emitida por BAM Alliance 3,pero en el momento de firmar el contrato, otra empresa —MTB Belgium—, fue contratada para la obra. Esta compañía, con un capital de apenas 18.000 euros, contrató a una firma rumana para reducir el costo de la fuerza laboral. En resultado, durante casi cuatro meses los constructores trabajaron sin recibir salario, ascendiendo la deuda de la empresa a 450.000 euros.

Un tribunal reconoció el problema, pero ahora será necesario demostrar que el consorcio BAM Alliance 3 es realmente responsable de las acciones de MTB Belgium que, desde entonces, permanece en quiebra y, por lo tanto, no puede pagar. Llama la atención que entre los directivos de MTB Belgium figure un empleado de BAM Alliance 3, lo que suscita dudas sobre la imparcialidad del consorcio.

A finales de este año se espera una nueva audiencia sobre el caso, que ha llamado la atención de los inspectores laborales belgas.

 

 

Fuente:  Actualidad RT

Comentarios