VITIVINICULTURA

Ponen en valor variedades de uva criolla para la producción de vino

El vicepresidente del Instituto de Nacional de la Vitivinicultura, Hugo Carmona contó que ya se han podido clasificar algunas variedades nuevas y que un emprendimiento sanjuanino ya está elaborando vino con esta nueva materia prima.
viernes, 5 de agosto de 2022 · 22:50

Se viene un cambio radical en la producción de vino de la región con la puesta en valor variedades de uva con convencionales para la producción de vino. Se trata de las criollas patrimoniales, son especies no comerciales que se han desarrollado en Latinoamérica, a través de la conquista española desde el año 1500 al 1800 y que las manos del hombre han ido desarrollando y multiplicando.

El vicepresidente del Instituto de Nacional de la Vitivinicultura, Hugo Carmona contó ya se han podido clasificar algunas variedades y que hay un emprendimiento que incluso ha elaborado vino a partir de ellas. “Hoy en día la tecnología del ADN y la información de la ampelografía (ciencia que estudia las vides) nos ha permitido identificar que dentro de esas criollas, nuevas variedades: La moscatel amarrillo, moscatel negro, moscatel blanco, canela. Son variedades criollas que no están en ningún lugar del mundo”, expresó a Canal 13.

IMG: Sitio Andino

En este sentido informó que en San Juan existen plantas centenarias que se han localizado principalmente en Calingasta, la bodega Cara Sur las ha seleccionado para la elaboración de vino, "hoy en día las está ofreciendo al público como una nueva alternativa respecto de las variedades comerciales que estamos acostumbrados”, agregó.

De aproximadamente 10.000 variedades de uva que se han registrado sin contar las criollas, apenas una decena de ellas se utiliza para la elaboración de los diferentes varietales de vino que conocemos, entre ellos los más tradicionales: cabernet, malbec, syrah, bonarda, chardonnay, entre otros. El objetivo es “ofrecer variedades que son de origen nacional, que no se cultivan en otro lugar del mundo y pueden ofrecer ortos sabores y aromas. Potenciarlas a través de un nuevo público consumidor, sobre todo jóvenes que buscan alternativas nuevas en el vino”, finalizó.