Después del Hombre

Lo que excede una flor, un perro, un árbol, un pájaro, una acequia con agua una necesidad originaria, un poema o la Palabra

es una ilusión

Una ilusión y otra ilusión y otra ilusión se llevan el Mundo

Y al Hombre que no asombra una flor

que no acaricia un perro, que no tiene un árbol, que no lo seduce el vuelo de los pájaros, que no moja sus manos en la acequia

que no puede definir una necesidad originaria, que no lleva un poema en el bolsillo

que no se esencia en la Palabra, a una ilusión lo somete una ilusión

Entonces

el perro y el pájaro se venden en el mercado

la flor es un adorno falso de la muerte

en el árbol cuelgan las bolsas con basura

al agua la ponen en botellas

la necesidad es una multiplicación

el poema no se edita

y la Palabra va disociada del Pensamiento

Y entonces

el Hombre ha muerto

No construye Sentido, no llora, se quedó sin el Silencio

no tiene un libro

no tiene un sueño

no tiene su Mundo. Transita

No tiene Incertidumbre. No tiene contingencia

Tiene un código alfanumérico, una máquina, una clave, otra máquina, otro código alfanumérico y otra clave

Tiene un mundo. No tiene ambigüedad. No tiene una obsesión

No tiene una ilusión

                                                                                    Miguel A. Montoya Jamed