ESTA MAL, PERO NO TAN MAL
Empresario se compró una isla para que no le suspendan sus eventos deportivos
Se trata del presidente de la UFC, quien no quiere seguir perdiendo dinero por cada fin de semana que pasa sin poder celebrar sus combates.
El empresario Dana White decidió comprar un isla privada para poder seguir realizando sus combates de MMA, (en español Artes Marciales Mixtas). El empresario tiene pensado montar todo en aquel lugar donde asegura, "estará libre de coronavirus". White tuvo su última gran velada el 14 de marzo en Brasilia, Brasil, uno de los lugares en el mundo con más fanáticos. Esa noche los brasileros no pudieron entrar al estadio porque las autoridades sanitarias dejaron realizar el evento pero sin público para evitar el contagio masivo de coronavirus. Lo curioso es que en aquel momento el presidente Bolsonaro tenía un encendido discurso que el COVID-19 era un "gripecita".
White contó que, “estamos instalando la infraestructura ahora, así que también comenzaré a hacer peleas con los luchadores internacionales. No los puedo llevar a Estados Unidos, pero sí allí. A partir del 18 de abril, la UFC vuelve a funcionar”. Ese día se celebrará el combate entre Tony Ferguson y Justin Gaethje, dos de los actuales máximo exponentes del octágono. "La pelea está confirmada ¡y se va a disputar en alguna parte del planeta Tierra!", escribió el propio White en su cuenta de Instagram. El empresario sostuvo que esa idea se le ocurrió después que le suspendieran por tercer fin de semana consecutivo sus veladas en distintos puntos de mundo.
“El lugar que albergará UFC 249 lo cerraré durante dos meses. El acuerdo es de esa duración, y vamos a dar peleas todas las semanas. En uno o dos días voy a tener la isla preparada”, dijo White dando algo más de detalles sobre la estrabagante idea. Pero no todo es color de rosa porque en estos combates no podrá estar la mega estrella Khabibi Nurmagomedov que está aislado en Rusia. Obviamente todas las peleas serán transmitidas para el mundo.
Con respecto al traslado de los luchadores White sostuvo que tiene también la solución. “Contamos con nuestros propios aviones privados”, dijo el empresario, "podremos despegar de cualquier hangar sin tener que ir a los grandes aeropuertos que están cerrados", sostuvo confiado. Con respecto a los aficionados que quieran ir a ver las peleas, si bien no está confirmado que no puedan ir, aquellos que tengan mucho dinero, lógicamente, si habrá invitados especiales. Abrá que esperar hasta el 18 para saber si el magnate logra concretar su capricho.
